Historias crueles de juventud
A Makoto, que todavía va al instituto, la salva del ataque de un hombre un estudiante universitario llamado Kiyoshi. Al día siguiente, él intenta aprovecharse de la situación y se acuesta con ella, aunque luego la rechaza. Pero ella no se resigna e insiste en volver a verlo. Comienza así una relación entre ambos: ella lo sigue a todas partes y se va acostumbrando a sus actos delictivos.