Marilyn
Marcos y su familia trabajan como peones de rancho. Mientras su padre y su hermano se encargan de las tareas más pesadas, Marcos se queda en casa, cerca de su madre. Cada uno tiene ante sí su futuro, pero Marcos espera su momento en el Carnaval, el único instante en el que puede dejar que su verdadero yo brille. La repentina muerte de su padre deja a su familia en una situación muy vulnerable. El dueño del rancho los persigue para que se vayan, mientras que la madre de Marcos lo presiona para que se haga cargo del trabajo en el campo. Apodada Marilyn por los otros adolescentes de la ciudad, Marcos es blanco del deseo y la discriminación.