Ubicada en una comunidad isleña muy conservadora y muy cerca de la costa sur de Irán, donde todas las mujeres usan burkas, esta película comienza como una investigación sobre el suicidio de una mujer llamada Samireh. Su esposo dice cruelmente que, si bien él se preocupa por la vida de sus hijos, la vida de las mujeres es barata. Sin embargo, las mujeres a las que entrevistó el director Oskouei, muchas de las cuales se casaron a los 12 o 13 años, se defendieron y discutieron sobre su difícil existencia.