Igelak (Ranas)
Pello es el director de una sucursal bancaria que, tras ser detenido por delitos económicos, se convierte en fugitivo de la justicia para evitar la cárcel. Así acaba, por casualidad, escondido en un edificio ocupado por desahuciados. En poco tiempo, el banquero (con una identidad falsa) se gana la confianza de los okupas, pero con la idea de aprovecharse de ellos para huir al extranjero y empezar una nueva vida.