Todos se van
Nieve vive la lucha de sus padres por su custodia. Eva, la madre, es una artista que cree en la revolución sin censuras ni autoritarismo. Se ha vuelto a casar con Dan, un sueco que trabaja en la construcción de una planta nuclear. Manuel, el padre, es un dramaturgo que se sacrifica para escribir teatro en una zona inóspita de la isla, con el sueño de construir el nuevo hombre latinoamericano. La batalla de los padres desemboca en un juicio en el que el Estado interviene de manera arbitraria. Nieve, con su padre, vive situaciones extremas que la llevan a inventarse la manera de volver con su madre. El desencanto radicaliza al padre mientras Eva y Nieve tratan de salir del país tras la expulsión de Dan.