¡Qué cosas tiene el amor!
Los hermanos Loinaz, dos chicas y un chico, viven de los pequeños hurtos que llevan a cabo en ambientes refinados. Cuando se enteran que Peret va a rodar una película en Marbella, en la que lucirá su magnífica colección de joyas, la familia al completo traslada su cuartel general a esa localidad.