Por una maleza.
Un sapo vive entre sus objetos compulsivamente acumulados, pero su obsesión le juega en contra cuando una planta comienza a extenderse entre sus muebles exponiendo la fragilidad de su hogar.
Un sapo vive entre sus objetos compulsivamente acumulados, pero su obsesión le juega en contra cuando una planta comienza a extenderse entre sus muebles exponiendo la fragilidad de su hogar.